Equivocarse es de idiotas

Hace unos días te dije que me equivoco mucho, muchísimo y te explicaba porque.

Ayer fue uno de esos días en que mi error fue un lastre por mucho tiempo.


Usuarios quejándose que no veían su dinero…como si les hubiésemos robado.

Los de atención al cliente ingeniándoselas para cobrirme el pellejo mientras arreglaba el problema o los problemas.

Bueno, ya sabes por donde voy.

Si, reconozco mi error, mí único error de ayer.

Y el error fue no tener el valor de arreglar el código de asqueroso que te conté.

Ese fue mi error.

Después hubieron problemas técnicos. Sí, los hubieron. Y su cause principal fue que no me atreví a hacer el cambio gordo.

No me atreví a coger el toro por los cuernos.

Una compañera del equipo me decía que el problema había sido que hemos querido desplegar a producción 5 microservicios a la vez y que si lo hubiésemos hecho uno a uno hubiésemos encontrado los errores más fácilmente.

Y tiene razón. Esa es la versión conservadora.

Yo de conversador tengo poco.

Moraleja: como dice Uncle Bob en la intro de Clean Code, “later means never”.

Esta vez he perdido 6 horas del día en arreglar el problema. No sé ya cuantas horas de programadores van acomuladas con este código.


Mi CTO me lee (o eso dice) y mi Tech lead…a ver si ya le hechan huevos y me dan el tiempo.

Estoy a un calentón más de arreglarlo.

PD: si tienes que desplegar 5 microservicios para hacer 1 funcionalidad, eso de microservicios tiene nada. Tiene su nombre y es monolito distribuido.

PD2: no se mucho del tema, pero otro día te cuento que es un monolito.


Soy Josué Alcántara y cada día envio un mail con una idea para escribir software de calidad. ¿A quién se la envío? A mi lista de suscriptores. Día que estás fuera, idea que te pierdes. Así de fácil.