Casi suena la sorpresa o sonó la sorpresa

Este mail era el de ayer. Para mi sorpresa, no lo programé bien y no se envió.

A mi me gusta mucho el fútbol. Puedo ver muchos partidos, de equipos buenos, claro.

Justo ahora acabo de ver los cuartos de final de la Champions.

Y han pasado dos cosas esta noche.

Por un lado, el Villareal ha dado la campanada y ha eliminado al Bayer de Munich. Es como decir que David venció a Goliad.

Sonó la sorpresa en el Allianz Arenas de Munich.

Por otro lado, el Real Madrid clasificó a semifinales contra el Chelsea con un resultado de 5-4 en dos partidos.

Y es que saltó la sorpresa en Munich y casi salta la sorpresa en Madrid. O bueno, podemos decir que saltó la sorpresa porqué ganó el Madrid. Que tenía todas las de perded.

Bueno que me puedo enrollar mucho con esto del fútbol.


Y es que es muy emocionante. El fútbol digo.

Justamente eso es lo que no debería ser el código.

El fútbol es emocionante porque no sabes lo que va a pasar en un partido.

En el código, si se supone que tiene que funcionar de una forma. Funciona de esa forma. Y si resulta que funciona de otra forma es que está dando sorpresitas, y esas las conocemos todos.

Cuando el código no está haciendo lo que se supone que debe de hacer se le llama principio de mínima sorpresa.

Pero es que la cosa se puede complicar aún más.

Vas a leer el código y te encuentras “sorpresitas” por todos lados.

Y sin nunca te has encontrado esas sorpresitas es que tienes que leer más código

Que tengas un buen día y lo disfrutes.

Josué.


Soy Josué Alcántara y cada día envio un mail con una idea para escribir software de calidad. ¿A quién se la envío? A mi lista de suscriptores. Día que estás fuera, idea que te pierdes. Así de fácil.